Terminé el material del Wikiproject después de meses de alteración y estaba listo para dejárselo ir rigurosamente a todos los huevones de Iberoamérica.
El Wikiproject era la segunda fase del proyecto Ikari. Era una instalación virtual y afectaría directamente el manejo de información escolar de secundarias y prepas. La etapa de preparación consistió en acumular artículos y temas de los planes oficiales que estudié para mi examen de admisión, modificarlos y subirlos de vuelta a la esfínternet. Cuando le conté a Crog y a Focko los pormenores, ya tenía listo un stock bastante gordo preparado durante el último año sin saber para qué lo utilizaría. El proyecto Ikari, incluso, no tenía nombre cuando empecé a trabajar en él.
La idea era suplantar ciertas páginas del Rincón del Vago y la Wikipedia en un sitio espejo diseñado por mí. Los artículos de la página, en apariencia, eran los mismos, pero con ayuda de Tongo, Fili y Baxter habíamos hecho algunas modificaciones, sobre todo de lógica y concordancia: intercambio de conceptos, incluso de palabras. Debajo de cada tópico había links para la página del proyecto; aunque Ikari no estaba listo la idea era enviarlos a una página donde se explicara el sentido de la instalación.
¿Cuál es la página? Gato —interrogó Focko aquella vez.
proyecto-ikari.blogspot.com
¿Cómo el de Evangelion?
Más o menos.
Mientras la sustitución no fuera descubierta, bajaría de manera tremenda el rendimiento académico y la eficiencia terminal, sobre todo entre bachilleres y universitarios holgazanes; porque lo soltaríamos de acuerdo con las fechas de los exámenes bimestrales, a mediados de abril, según el calendario de la sep.
El Wikiproject se debía habilitar todo en un día, en un momento; el phishing lo haría Black desde una computadora pública. Yo no entendía mucho de eso; él sí, y estaba divertidísimo con la idea.
Tendríamos cerca de 48 horas para documentar todo, incluso podríamos tener menos, quizá horas, minutos, eso si teníamos la suerte de romper firewalls, antiphishings y demás softwares, según me explicó Black. Después, los programadores de los sitios auténticos lo descubrirían, hackearían nuestra página espejo, lanzarían un aviso y, quizá, una demanda.
Para eso estábamos relativamente protegidos, si se abría una investigación sólo podrían saber que el ataque se produjo desde Agnosia, no más; la ip de Matusalén, según dijo Black, había sido desviada a un servidor en Israel, donde las regulaciones sobre web aún no estaban tan controladas.
Aunque a Crog y a Focko les encantó la idea, lo supe de antemano: tendría que hacerlo prácticamente yo solo.
Parte de las alteraciones consistieron en falsear información sobre pedagogos, psicólogos, políticos, científicos y cualquier cosa sujeta a ser educable, instituciones, conceptos y corrientes científicas, filosóficas, artísticas y sociológicas, toda información susceptible a alteración.
En algunos casos sólo cambiamos conceptos o datos significativos como fechas, nombres u ocupaciones. Dijimos, por ejemplo: “El aprendizaje significativo era de Vigotsky”, eso sólo generaba un poco de incredulidad en un buen pedagogo; mas en uno que se iniciaba era la diferencia entre entender los paradigmas o ser un perfecto imbécil. Otros ejemplos: mezclar a Pearls y Wertheimer a partir del concepto de gestalt; disociar a Pavlov del conductismo, a Frankl de la logoterapia; o decir que Schopenhauer era contemporáneo de Nietzsche y concordaba con las ideas de Hegel, por mencionar las más obtusas y evidentes; en otros casos era una reestructuración de acuerdo con la inspiración del momento: Oparin y Erasmus intercambiados, Lamark y Darwin coincidiendo; dos o tres experimentos de química alterados, las recetas de algunos explosivos caseros en experimentos de coloración; hasta incipientes brebajes venenosos obtenidos de un manual de botánica oculta de Fili, intercambiados con filtros de amor; una impostura informativa que pocos se detendrían a analizar por la premura de terminar sus tareas o, con más inocencia, por ser su primer acercamiento a los temas; eso gracias a la libertad de la red para subir toda la basura que uno deseara. Una lástima.
Black hizo el phishing a las diez de la noche, hora de España. El sitio permaneció operando unas 16 horas antes de que lo hackearan.
Esperamos hasta octubre para publicar los resultados de la segunda fase en la página principal, junto con Vendetta y Virgin, primera y tercera fases, respectivamente, cuando ya todo se había enfriado. Los resultados, a diferencia de la fase Vendetta, fueron más perdurables, aunque tuvieron menos difusión mediática.
Algunos días después pude ver ciertos resultados en los trabajos finales de Estética de la Prepa Uno. Nos pidieron un cuadro comparativo del neoclásico y el barroco. Algunos vatos de mi clase llevaron uno de mis textos, en el cual afirmaban “con los pelos en la mano”: «el barroco fue posterior al neoclásico y entre sus características más marcadas está un claro recargamiento de la construcción estructural y una austeridad ejemplar» (en este caso, se refería a cualquier otro híbrido agustino, no al barroco), mientras que en el neoclásico «las columnas se distinguían por tres tipos de capitolios de los distintos ordenes: el toscano, el bizantino y el salomónico».
Cuando la profesora les preguntó si sabían qué era Corinto, ellos respondieron con mucha seguridad:
Una ciudad-burdel, el putero más grande de la antigua Grecia, miss.
Más de la mitad del grupo reprobó la materia. Luego de unos días el pequeño Sócrates de bolsillo me hizo sentir un leve remordimiento por provocar indirectamente aquellas deserciones. La instalación los jodió, es cierto, mas pagaban las consecuencias de su desidia. Hoy día aún deben existir personas revisando la página: universitarios, bachilleres, estudiantes de maestrías. Después de incidentes de este tipo, les prohibieron la Wikipedia en sus fuentes. Aunque acceden al archivo del Wikiproject (el cual actualizo de vez en cuando, ya con el nombre de Fakipedia) para cometer el mismo error.
En la fase dos del proyecto Ikari presentamos los resultados de la instalación: una de las justificaciones artísticas referidas en la introducción era justamente la siguiente: «Uno de los errores más comunes de las personas es creer ciegamente que los contenidos de los medios electrónicos, las palabras impresas, el televicio o el comentario “crítico” de un locutor son ciertos, reales o acertados a priori sólo porque muchos los ven presentados en formatos bien diseñados, o cuadro por cuadro». Toda una teoría de masas, retórica, imago, etcétera, etcétera, etcétera.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario